La música y el ejercicio parecen ir de la mano. Para muchos, la música es lo único que los lleva al gimnasio, los ayuda a profundizar durante un entrenamiento duro y los mantiene motivados durante las carreras largas o los paseos en bicicleta. Ya sea que no pueda vivir sin sus listas de reproducción de entrenamiento o que solo use audífonos ocasionalmente, puede ser beneficioso escuchar música durante sus entrenamientos. Los investigadores han estudiado el vínculo entre la música y el ejercicio durante años y, en general, han encontrado muchos beneficios al crear una lista de reproducción cuando vas al gimnasio. Esto es lo que debe saber:

  1. Mejora tu rendimiento y resistencia

    No es una ilusión que pareces rendir mejor cuando escuchas música durante tu entrenamiento. Un estudio de ciclistas descubrió que trabajaban más duro, recorrieron más distancia y produjeron más potencia cuando escuchaban música. La música motivadora también puede mejorar la resistencia, aumentar el tiempo que se tarda en llegar al agotamiento y hacer que se sienta menos fatigado .

  2. Te dan ganas de boogie

    Solo hay algunas canciones que te dan ganas de moverte, y no es solo porque sean pegadizas. Los investigadores han descubierto que la música activa su sistema motor y puede ayudar a inducir el movimiento, lo cual no es una mala manera de poner en marcha su sesión de gimnasio.

  3. Te ayuda a estar en la zona

    Todos tenemos esa canción que automáticamente nos entusiasma. De hecho, los investigadores han descubierto que escuchar música puede ayudar a aumentar la energía y el rendimiento del trabajo, así como también ayudarlo a visualizar su tarea antes de salir a la pista, los senderos o la sala de pesas.

  4. Ayuda a que su cuerpo se mueva de manera eficiente

    ¿Crees que tu cuerpo se mueve automáticamente con la música? Hay una razón para eso. Como un metrónomo, los latidos de una canción pueden influir en su cadencia, particularmente en deportes como correr y andar en bicicleta, y hacer que sea más fácil mantener un ritmo óptimo. Los estudios también han demostrado que su cuerpo se mueve de manera más eficiente cuando el ejercicio se realiza en sincronía con la música.

    Así que cuando estés haciendo tu próxima lista de reproducción, asegúrate de prestar atención a los latidos por minuto (bpm) de cada canción. Elija canciones que correspondan al ritmo de su entrenamiento: canciones con menos bpm para su calentamiento y enfriamiento, y canciones con más bpm para su entrenamiento principal. Según Costas Karageorghis, PhD , de la Universidad de Brunel en Londres, el punto óptimo está entre 120 y 140 lpm.

  5. es una buena distraccion

    No es ningún secreto que la razón por la que muchos de nosotros elegimos escuchar música mientras hacemos ejercicio es para distraernos de la incomodidad y el aburrimiento. De hecho, la música puede mantener tu cerebro ocupado y mejorar tu estado de ánimo , lo que puede ser una de las razones por las que las melodías pueden evitar que pienses en lo duro que es tu entrenamiento.

  6. Te mantiene motivado

    Las canciones motivadoras en tu lista de reproducción pueden inundarte de positividad en el momento justo. También puede hacer que sea un poco más fácil avanzar en tu sesión de entrenamiento cuando los demonios mentales y las dudas comiencen a surgir.

    Cuándo desconectarse

    Hay momentos en los que debes mantenerlo en silencio. La música puede hacer que sea difícil escuchar tu cuerpo, ocultando dolores y molestias a los que debes prestar atención. Además, con los auriculares puestos, es más probable que te pierdas lo que te rodea, desde el canto de los pájaros hasta las nubes que se arremolinan sobre tu cabeza. También puede ser peligroso, especialmente si corre temprano en la mañana o tarde en la noche, anda en bicicleta en medio del tráfico o camina por el bosque.

    En última instancia, combinar música y ejercicio es una preferencia personal. Si eso incluye una lista de reproducción de interferencia, asegúrese de bajar el volumen para evitar dañar su audición. Encuentra lo que funciona mejor para ti y será más probable que sigas con tu rutina de ejercicios.