Cortar cebollas suele ser uno de los primeros pasos que das cuando estás haciendo una comida. Ya sea que estés haciendo sopa, salsa o asado, las cebollas proporcionan una gran cantidad de sabor. También son versátiles, y debido a que son altos en fitoquímicos y fibra, ofrecen beneficios para la salud cuando consumes tan solo 1/4 taza al día. ¿El único problema? Si eres como la mayoría de la gente, cortarte una cebolla te trae lágrimas a los ojos. Tan pronto como te cortes en la piel, esa sensación de ardor familiar hormiguea tus conductos lagrimales. Según Scientific American, eso se debe a que picar cebollas libera Syn-propanetial-S-óxido, un químico que estimula a los ojos a llorar. Entonces, en lugar de cortarte las cebollas de tu vida, ¿qué puedes hacer para minimizar esta sensación? Aquí hay seis opciones.

1. Enfrío la Cebolla Primero

Debido a que las moléculas se mueven más rápido cuando están calientes, y se mueven más lentamente cuando están frías, un truco que puedes probar es meter las cebollas en la nevera o congelador unos minutos antes de cortarlas. Al enfriarlos rápidamente, puede minimizar la efectividad de sus químicos ofensivos y salvar sus ojos de sentirse irritados.

2. Remojarlo en agua

Este consejo es similar a escalofriar una cebolla antes de picarla. Pelar la cebolla e inmediatamente pegarla en un baño de agua fría durante unos minutos. Saca, y lo más probable es que encuentres que el proceso de cortar sea menos frustrante.

3. Deja intacta la raíz

Si bien no eliminará por completo los efectos irritantes, muchas personas coinciden en que cortar una cebolla con su raíz aún intacta puede minimizar tus molestias. Debido a que hay una mayor concentración de químicos que se liberan en la raíz, evitarlo durante tus esfuerzos de picar puede ser útil.

4. Picar cerca de una llama abierta

Coloque su tabla de cortar cerca de una vela encendida, un quemador de gas activo u otra fuente de llama, y es posible que pueda picar la cebolla con facilidad. Debido a que el fuego naturalmente aspira aire, puede tirar de la sustancia infractora y evitar que llegue a tus ojos. La propia Martha Stewart jura por esta técnica.

5. Ponle algo en la boca

Sostenga una rebanada de pan en la boca mientras pica la cebolla. Esto le dará a esas moléculas químicas irritantes un lugar al que ir que no está en tus ojos. Alternativamente, mantener una cerilla sin luz entre los dientes puede proporcionar el mismo beneficio.

6. Usa una Licuadora

Ahórrese la molestia de tratar de evitar las lágrimas dejando que una licuadora haga el picado por usted. Como bono adicional, puedes estar seguro de que estás usando la cebolla entera y evitando el desperdicio cuando dejas que tu licuadora se encargue del trabajo. Simplemente despega la piel de tu cebolla y córtala rápidamente en cuartos. Pon estos cuartos en tu licuadora, y pulsa la cebolla hasta que estés satisfecho con la textura. Las licuadoras que incluyen un recipiente más pequeño son perfectas para esta tarea rápida.

El mejor método de picar cebolla para ti es cuestión de preferencia y gusto, pero si buscas un nuevo truco para probar, considera estos consejos. Ya sea que enfries tu cebolla, la piques cerca de un fuego o la sueltas en tu licuadora, tienes muchas posibilidades para minimizar las lágrimas mientras trabajas.